Con la puesta en operación del Puerto Fronterizo Guadalupe-Tornillo, se incorporan vialidades internas para vehículos ligeros y autobuses, con espacios idóneos para recibir, almacenar y trasladar mercancías entre ambos lados de la frontera.
En el evento, que estuvo presidido por el Presidente de México, Enrique Peña Nieto, se informó que con una longitud de 215 metros sobre el Río Bravo, el Puerto brindará servicio a cerca de 60 mil peatones y a más de dos mil 400 vehículos que lo cruzan al día.
Y con la construcción del Entronque Vial La Ribereña, de cuatro carriles y una longitud de 186 metros, se conecta la Carretera Federal Mex-2 con el nuevo Puerto Fronterizo.
De esta manera se robustece uno de los cerca de 60 cruces fronterizos, mediante los cuales transitan diariamente más de un millón de personas,  300 mil vehículos y se desplaza aproximadamente el 70% de nuestro comercio bilateral con Estados Unidos.
Por otra parte, el Mandatario mexicano anunció que en breve se construirá el Libramiento de Juárez, que conectará el Entronque de La Ribereña, donde está el nuevo Puente Guadalupe-Tornillo, con la Carretera Federal 45 que llega hasta el centro del país.
Con este libramiento, se evitará que el tránsito pesado de largo itinerario cruce por Ciudad Juárez; lo que reducirá los tiempos de recorrido de las mercancías, y sobre todo, se incrementará la calidad de vida de los habitantes de este municipio.