Ante la falta de medidas gubernamentales para proteger la salud de las personas, como la recomendación de confinamiento y la reducción de viajes no esenciales, los sistemas de transporte y las principales carreteras del país contribuyen a incrementar el número de contagios del COVID-19.

De acuerdo con un análisis del Instituto Mexicano del Transporte (IMT), la propagación de la epidemia es mucho más fácil en el transporte público masivo que en el traslado individual, ya que las personas pasan un tiempo significativo en la ruta y pueden participar en diversas actividades a lo largo de ella.

Advierte que existe una alta probabilidad de infección cruzada durante el viaje debido a la superposición de los diferentes modos de transporte, particularmente cuando los viajes interurbanos se conectan con los de transporte urbano.

A ello, se suma que este factor tiene que ver también con los principales corredores de transporte del país, y en los cuales existe un número mayor de casos confirmados de COVID-19 por municipio.

Según un mapa georeferencial del IMT, analizando escenarios relacionados, la red de carreteras y la información de casos de contagio de COVID-19 van de la mano, al destacar que el mayor tránsito en los corredores de transporte carretero en los municipios en rojo, la cantidad de casos de contagio confirmados va en aumento.

A simple vista, los resultados muestran cómo los principales corredores carreteros unen a los municipios con mayor cantidad de casos confirmados, “por lo que como primer hallazgo puede decirse que el sistema carretero en el país ha contribuido a dispersar el virus, debido posiblemente a la falta de atención a las recomendaciones de sana distancia  y a insuficiencias en la implantación de medidas oportunas de filtrado sanitario eficaces en terminales de autobuses, a pesar de las limitaciones dispuestas a los viajes interurbanos relacionados con actividades no esenciales”.

El organismo detalló que al haber una mayor densidad de vialidades, la propagación del virus es más extensa. Sin importar el medio utilizado, el transporte constituye una actividad con alta incidencia en las tasas de contagio, por las diferentes posibilidades de transmisión del virus durante el viaje.

Por ejemplo, el corredor Acapulco-Veracruz, con la aproximación del corredor vial entre la Ciudad de México y la de Acapulco, se aprecia también, el centro del país, donde se han concentrado la mayoría de los casos y donde existe una mayor densidad vial.

En conclusión, el estudio del IMT considera que mientras no existan medidas de restricción de modalidad interurbana para los viajes no esenciales de pasajeros, o de incluso de mercancías, la dinámica de dispersión del virus a través de los corredores de transporte continuará.

Mencionó que los resultados obtenidos permitieron comprobar que existe una clara correlación entre los corredores de transporte y la red de carreteras, debido a los viajes interurbanos, los cuales propician la dispersión del virus en el país.