Buena conducción aporta hasta 30% en eficiencia de combustible

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Una buena conducción de los transportistas puede tener un impacto de hasta 30% en la eficiencia de combustible, consideran especialistas.

De acuerdo con un artículo de Navistar México, las buenas prácticas en conducción, además de favorecer un menor consumo de combustible, puede ayudar a ahorrar miles de pesos.

“Está claro que no puedes ser omnipresente y estar con ellos (los operadores) en cada recorrido que hacen, pero sí puedes incentivarlos y capacitarlos para que adopten mejores prácticas, ayudándote a ahorrar miles de pesos mientras recorren sus trayectos”, afirmó Navistar.

La armadora de camiones International explica que, para fomentar las buenas prácticas de conducción, primero hay que conocer los factores que impactan a la economía de combustible, los cuales son:

Aerodinámica y velocidad del camión: la aceleración sumada a la aerodinámica del vehículo aumenta exponencialmente con la velocidad del vehículo.

Factores ambientales como la temperatura del aire, las condiciones climáticas y las superficies del camino.

Configuración del vehículo: para minimizar el consumo de combustible, algunos especialistas recomiendan cierto tipo de llantas acorde con la capacidad de ejes.

Inflado adecuado de los neumáticos.

Alineación de las llantas para que no presenten mucha resistencia al rodar.

Hábitos o estilo de conducción del operador. La conducción agresiva puede acabar rápidamente con las llantas y los componentes del camión, así como incrementar el consumo de combustible.

Consejos básicos

Navistar propone algunos consejos básicos para ayudar en la conducción, como el mantener una velocidad constante dentro de lo permisible y evitar acelerar bruscamente, factores que ayudan a mantener un buen rendimiento. Es cierto que muy pocas personas se atreverían a recomendar que manejen más lento, pero la velocidad es la primera razón por la que aumenta el consumo de diesel.

Por otra parte, si un operador conduce más rápido estará antes en su destino, pero habrán gastado más dinero en rellenar el tanque (multiplica este efecto por los miles de kilómetros que recorren). Entonces, lo ideal es que se establezca una media de consumo y velocidad por cada “equis” kilómetros recorridos.

De igual forma, es importante que los operadores comprendan el uso de los frenos. Es inevitable usarlos y existen por seguridad, pero cada vez que se pisa el freno, la unidad pierde energía y quema combustible cuando necesita recuperar la velocidad. Lo mejor es que se anticipen a los cambios en el tráfico, aceleren gradualmente y mantengan una buena distancia con los otros vehículos para evitar frenar constantemente.

No deben olvidar revisar la presión de las llantas antes de salir. La correcta presurización de las llantas ayuda a soportar la carga pesada y reducir la resistencia al rodar, lo cual puede disminuir el consumo de combustible.

Por último, es recomendable planear la ruta con anticipación, pues también juega un papel fundamental ya que permite evitar los problemas del camino –como evadir las construcciones o las ciudades congestionadas si no es necesario–.

 

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