La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), urgió a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), a normar las jornadas de conducción y descanso que cumplen los operadores, así como regular los pesos y dimensiones de los camiones de carga y propiciar la renovación vehicular en la industria, ya que la antigüedad de la actual flota vehicular aumenta los riesgos de accidentes.
En el Foro Competencia y Regulación “En búsqueda de la eficiencia de los mercados”, la subsecretaria de Transporte, Yuriria Mascott Pérez, dijo que la SCT trabaja para lograr un marco normativo eficiente en materia de transporte de carga a fin de generar certidumbre para la inversión y promover la competencia.
Organizado por la Secretaría de Economía, la OCDE, y la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), en el Foro se presentan y discuten una serie de reportes que tienen el objetivo de mostrar diagnósticos y proponer medidas que permitan la eficiencia de los mercados.
El estudio sobre la regulación del transporte de carga en México, señala que el 67% del comercio internacional de México, en cuanto a valor, se lleva a cabo por carretera, en particular en la frontera con Estados Unidos, por tanto, una regulación de calidad del sector transporte incidirá directamente en las exportaciones y en el crecimiento de la economía.
La subsecretaria de Transporte destacó que “es indispensable tener sistemas de transporte y comunicaciones que sean competitivos y sustentables, cuyo desarrollo demanda un entorno regulatorio que dé certidumbre con reglas claras y que promueva la competencia como principal incentivo para la actualización, innovación y eficiencia”.
Explicó que la aviación crece a tasas históricas: en los últimos cuatro años el número de pasajeros creció más del 40%, el ferrocarril y el autotransporte, por su parte, mantienen tasas de crecimiento superiores a las de la economía. También la inversión de los grupos aeroportuarios aumentó en un 53% en los primeros tres años de esta administración, en tanto que la inversión privada de ferrocarriles creció en un 64 por ciento.