Para Isuzu Motors de México el suministro de partes y las áreas de servicio no se detienen. En tiempos de la pandemia por el COVID-19, la marca está preparada para brindar mantenimiento a los vehículos, cuidar la salud de los clientes y colaboradores, cumpliendo con las medidas de higiene necesarias.

De acuerdo con Isuzu, se debe garantizar la operación de los clientes que llevan a cabo actividades esenciales, por lo que los talleres de servicio de los concesionarios también continúan trabajando por ser una actividad esencial. Todas las labores, se realizan bajo los protocolos recomendados por la Secretaría de Salud.

Para dar una mejor atención, aseguró Constantino Vázquez, gerente de mercadotecnia y planeación de ventas de Isuzu en México, se recomienda a los clientes hablar directamente a cada concesionario para agendar sus visitas al área de servicio, y de esa manera evitar saturaciones en las zonas de espera.

Respecto a la disponibilidad de refacciones, afirmó que los concesionarios cuentan con suficiente stock de partes de alto movimiento, además de un adicional, por parte de la planta, de aquellas piezas de bajo movimiento.

En cuanto a la planta de Isuzu situada en el parque industrial San Martín Obispo, en el Estado de México, el directivo señaló que aunque tienen pedidos pendientes, desde inicios de abril de 2020 cerró temporalmente operaciones.

Agregó que las actividades seguirán detenidas hasta que las autoridades autoricen el reinicio. En esta localidad, que tiene más de 10 años, la marca japonesa ha ensamblado desde los camiones ELF 600 hasta los modelos Forward 1400.

Finalmente, informó que los colaboradores de las oficinas corporativas están operando de manera remota, atendiendo los requerimientos de los clientes y concesionarios.