Volvo Group Trucks, que integra las marcas de camiones Volvo y Mack, tiene dos estrategias para 2017 a fin de fortalecer sus ventas y apoyar a nuevos clientes: la primera es mantener el precio de sus vehículos en pesos y, a través de Volvo Financial, enfocarse al desarrollo del hombre camión y las empresas pequeñas.
Marco Antonio Ortega Martínez, Director General de Volvo Group Trucks, adelantó que la empresa cerró el 2016 con cerca de 1,200 unidades vendidas, de las cuales un 75% fue de la marca Volvo y el 30% restante de Mack. Además, abrió el mercado del transporte privado para sus unidades cabover que, de manera paulatina, van ganando terreno en la preferencia de los clientes.
En un análisis del panorama que enfrenta la industria mexicana de vehículos pesados, indica: “Tenemos que prepararnos, vienen retos fuertes, importantes, pero en el sector transporte nos hemos desarrollado a través de los años con diversos retos y hemos salido adelante. El empresario mexicano siempre está dispuesto a encontrar la manera de solucionar los problemas que se presentan”.
Añade que la empresa tiene un inventario de vehículos disponibles para la comercialización en moneda nacional y eso facilitará que el transportista pueda comprar las unidades a un precio conocido y no esperar a ver cómo varía con los tipos de cambio.
En la estrategia participará de manera activa Volvo Financial que tiene cerca de un 55% de participación de todas las ventas del Grupo y también esa división están desarrollando programas interesantes, enfocados al hombre camión y a las pequeñas empresas.
Ortega Martínez, entrevistado durante la entrega de unidades a la Cámara Nacional del Transporte de Carga (Canacar), destacó el esfuerzo que hacen las marcas al ajustar sus precios y participar en el mercado ya que es grande la necesidad de renovar la flota, de crecer, de mover productos a la frontera, de atender nuevas líneas de negocio que se han desarrollado en los dos últimos años, como es el caso de las unidades madrina.
“Son oportunidades que existen y entendemos que la parte política de Estados Unidos y su nuevo presidente ha traído inestabilidad a México por lo que pudiera suceder. Pero hay inversiones tan fuertes que difícilmente vamos a decir que por una opinión se vaya a caer toda la actividad aquí en México”, subraya.