Como parte de las acciones del programa “Accelerate the good”, la planta de KIA Motors en Georgia, Estados Unidos, fabricará equipos de protección personal para ayudar a las personas afectadas por la pandemia del COVID-19.

La armadora anunció que, utilizando los lineamientos del distanciamiento social, una parte de la planta de KIA en Estados Unidos se ha transformado en un área de producción especializada capaz de producir hasta 200 mil protectores por mes.

Las donaciones de los protectores faciales comenzarán a entregarse esta semana en los alrededores de West Point, Georgia, en Agencias de Emergencias del estado e instalaciones médicas en el sur de California y Nueva York.

Los equipos serán elaborados por personal voluntario, bajo una serie de medidas de seguridad para proteger a los miembros del equipo; se realizan escaneos de temperatura, se les proporcionan máscaras faciales, guantes y estaciones de rabajo amplias y sanitizadas.

Los materiales provienen de proveedores como 3-Dimensional Services Group, un fabricante de respuesta rápida con sede en Michigan, que admite prototipos y aplicaciones de producción de bajo volumen.

“Brindar ayuda de manera significativa es un componente clave de la estrategia Give It Everything de KIA Motors en Estados Unidos. El programa Accelerate the good identifica áreas donde se puede tener el mayor impacto, por lo que estamos orgullosos de prestar nuestras capacidades de fabricación y talentos para producir protectores faciales que servirán a los valientes trabajadores de la salud de Estados Unidos”, señaló Sean Yoon, presidente y CEO de KIA Motors North America.

La producción de caretas es la última expansión de dicho esquema, luego de la promesa de la compañía de donar un total de un millón de dólares a socios sin fines de lucro que ayudan a jóvenes sin hogar en todo el país, incluyendo Covenant House, StandUp for Kids y Family Promise.

Asimismo, el apoyo ayudará a proporcionar refugio y cuidados muy necesarios para ayudar a combatir la propagación de COVID-19.

Anteriormente, la marca donó máscaras y guantes N95 a instalaciones médicas en el Condado de Orange, California, donde se encuentra la sede de la marca en el vecino país.