La compañía automotriz presentó sus planes de popularización de movilidad cero emisiones para la década 2020-2030, los cuales se centran en la aceleración del desarrollo y lanzamiento de vehículos eléctricos híbridos (HEVs), eléctricos híbridos enchufables, eléctricos de batería (BEVs) y eléctricos de celdas de combustible (FCEVs).
 
En el 2020, la armadora contará con más de 10 unidades de BEVs y la línea FCEV se expandirá para vehículos de pasajeros y comerciales, mientras que para el 2025 los autos de Toyota y Lexus estarán disponibles como un modelo totalmente eléctrico o con una opción de energía de este tipo.  
 
Adicionalmente, la línea de HEV también crecerá, gracias al desarrollo del sistema híbrido Toyota II, que ofrecerá una versión más potente en algunos modelos.
 
Por otro lado, la empresa japonesa presentará y comercializará baterías de estado sólido de próxima generación e iniciará en conjunto con Panasonic un estudio de viabilidad para la creación de pilas prismáticas automotrices.
 
Además, entre los planes Toyota está el desarrollo de un sistema para ayudar a optimizar la reutilización y el reciclaje de baterías, así como el apoyo de la promoción de estaciones de carga de vehículos enchufables y estaciones de recarga de hidrógeno a través de la cooperación activa y la colaboración con el gobierno autoridades y empresas asociadas.
Estas estrategias forman parte del proyecto Toyota Environmental Challenge 2050, el cual busca reducir el impacto negativo durante la fabricación y conducción de los vehículos, y de esa manera atender desafíos medioambientales como el calentamiento global la contaminación atmosférica, los recursos naturales limitados y el suministro de energía.