El crecimiento de la venta de vehículos ligeros en México muestra signos de desaceleración, reflejando un menor dinamismo en la economía y un mercado cada vez más competitivo, advirtió Guillermo Rosales, presidente de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA).
En febrero de 2025, se comercializaron 117 mil 679 unidades, lo que representa un incremento del 2.9% respecto al mismo mes del año anterior. Sin embargo, esta cifra es menor a los crecimientos registrados en meses previos y está en línea con la moderación del consumo interno.
En el acumulado enero-febrero, las ventas sumaron 237 mil 659 unidades, un aumento del 4.5% frente al mismo periodo de 2024. Sin embargo, Rosales advirtió que la tendencia apunta a un crecimiento más moderado en los próximos meses.
En términos de desempeño por categoría, los autos de lujo y los vehículos de usos múltiples fueron los únicos segmentos con cifras negativas. Los primeros reportaron una caída del 11.9%, mientras que los segundos retrocedieron 4.5%.
A pesar de estos retrocesos, otros segmentos aún mantienen crecimiento, como los autos deportivos (+28.5%), las pick-ups (+15.7%) y los camiones pesados de Ford (+40.7%).
No obstante, la desaceleración en la actividad económica del país comienza a reflejarse en el comportamiento del mercado interno.
Factores económicos y confianza del consumidor
El menor dinamismo en la economía, la incertidumbre comercial con Estados Unidos y la cautela de los consumidores han influido en la desaceleración del mercado automotor, indicó Rosales.
El índice de confianza del consumidor cayó 2.3% en el rubro de compra de bienes duraderos, aunque la intención de adquirir un vehículo en los próximos dos años creció 3.1% frente a febrero de 2024.
En términos de financiamiento, la colocación de crédito para la compra de vehículos subió 13.2% en enero, mientras que la cartera vencida se mantiene en 1.04%, reflejando estabilidad en los pagos de los compradores.
Perspectivas del sector
A pesar del incremento en las ventas, la AMDA prevé una desaceleración en el crecimiento del mercado durante los próximos meses, con posibilidad de ligeras caídas o estancamiento en algunos segmentos.
“El panorama para 2025 es retador, con consumidores más cautelosos y una economía en desaceleración. El financiamiento seguirá siendo clave para mantener la comercialización de vehículos en el país”, concluyó Rosales.
Por último, el directivo de la AMDA expuso dos escenarios sobre las expectativas de ventas para marzo y su acumulado 2025.
En el primero se visualiza una comercialización de 125 mil 85 unidades con una contracción del 0.5% y un millón 528 mil 572 vehículos en con un avance de 2.1%.
En tanto que en el segundo, las expectativas serían de 119 mil 480 con una baja de 5.0% y un millón 486 mil 785 con menos 0.7 por ciento.