Durante 2017, los empleados de Bridgestone trabajarán para definir sus objetivos ambientales y para establecer indicadores clave de desempeño para las áreas prioritarias de movilidad y personas, basándose en mejores prácticas y en compromisos con partes interesadas clave.
Junto con estas áreas prioritarias, la empresa seguirá trabajando para cumplir con las expectativas de gobernanza, cumplimiento y comportamiento de cualquier compañía responsable. Estos principios básicos, conocidos en Bridgestone como Principios de Gestión, están divididos en seis áreas principales:
– Cumplimiento regulatorio y competencia justa.
– Continuidad del negocio y gestión de riesgos.
– Derechos humanos y prácticas laborales.
– Seguridad e higiene industrial.
– Compras.
– Calidad y valor para el cliente.
Bridgestone, que tiene presencia en más de 150 países, conoce la importancia de establecer relaciones de confianza con las comunidades locales donde opera y de contribuir a su desarrollo. En su Informe de Sostenibilidad, la empresa describe los esfuerzos que ha implementado en pos de crear comunidades más seguras, saludables y sostenibles.
Lo anterior, al anunciar que como parte de su Responsabilidad Social Empresarial (RSE), está centrada en tres áreas prioritarias: Movilidad, Personas y Medio Ambiente.
