En el camino hacia una logística verde, aún hay grandes retos por parte del sector logístico y consumidores para contribuir con la reducción de emisiones, y la contención de desperdicios.
Hoy más que nunca, es importante contar con una mayor inteligencia logística, procesos sistematizados y proveedores que promuevan en sus procesos un mayor impulso de prácticas amigables con el medio ambiente.
Expertos de Sodexo identifican la logística verde como una pieza clave para comenzar a reducir el impacto en la cadena de suministro, desde diferentes áreas.
- Transporte: en la carrera por reducir la huella ambiental en el transporte de mercancías, los camiones eléctricos o híbridos, e incluso la elección de combustibles como el biodiesel, juegan un papel imprescindible para optar por sistemas sostenibles y amigables con el medio ambiente.
Sin embargo, no son los únicos, también generar reportes de eficiencia del uso de combustible es clave, ya que a raíz de esta data se puede regular su uso, así como crear rutas estratégicas para evitar traslados con poca carga o vacíos; es una forma eficiente de contribuir con el transporte verde.
- Almacenamiento: se pueden implementar buenas prácticas para reducir la huella ecológica en los almacenes con otros sistemas automatizados conectados al internet de las cosas (IOT). Estos permiten iluminar o encender el aire acondicionado de manera automatizada cuando detecta que los trabajadores inician sus labores, abonando mayor eficiencia y menos impacto ambiental.
Otra práctica que comienza a tomar auge son los almacenes llamados “dark warehouse” que se caracterizan por ser totalmente automatizados, no requieren iluminación ni mano de obra y dependen de máquinas y software, con lo cual hay grandes ahorros.
- Empaques ecofriendly: Las bolsas, cajas de cartón, plástico y pallets que se utilizan para almacenar, empacar y enviar los productos desde el almacén hasta llegar al consumidor final.
Un gran acierto para la logística verde es reducir el uso de estos insumos y sustituirlos por materiales reciclables de larga duración, para que se puedan reutilizar en varias ocasiones dentro de la cadena de distribución.
- Reciclaje y procesamiento: No hay una política clara con relación al manejo de residuos cuando se entrega la mercancía, y muchos no se reciclan ni se devuelven a la cadena de suministro.
En este sentido, los consumidores también pueden tener un papel activo al devolver estos materiales como plástico, cajas, e incluso llevarlos a centros de recolección. Los distribuidores también pueden contribuir en la recolección de estos materiales.