México debe aumentar la producción de gas natural e invertir para ampliar la infraestructura para su distribución y almacenamiento, si quiere aprovechar las oportunidades que brinda el nearshoring.
Hoy el país importa 75% del combustible que se demanda y su capacidad de almacenamiento estimada es de 2.4 días.
“Para aprovechar el nearshoring, debemos garantizar el acceso competitivo a materias primas y combustibles con soluciones integrales que se adapten a las necesidades de pequeñas, medianas y grandes empresas que, a su vez, faciliten y sumen a la descarbonización de las industrias”, aseguró Carlos Boone, director de Inteligencia de Negocio de Énestas.
Datos de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), destacan que el gas natural es el combustible que más se consume en México desde 2014 y su participación en la canasta energética concentra el 48 por ciento.
La cifra va en ascenso por la demanda del sector industrial.
Sin embargo, un análisis del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), advierte que, a diferencia de otros países como Francia, Alemania o España que tienen una capacidad de almacenamiento de 98.8, 93.8 o 34.2 días, respectivamente, la de México es apenas de 2.4.
Eso representa un riesgo para garantizar el abasto a las empresas extranjeras que quieran relocalizar sus cadenas productivas en nuestro país.
Urgen a aumentar infraestructura y almacenamiento de gas natural
Para lograr que el sector industrial en México tenga acceso al gas natural, compañías nacionales como Énestas han desarrollado soluciones que permiten que las empresas tengan acceso competitivo a este energético en cualquier punto del país.
La empresa cuenta con estaciones de aprovechamiento o precios competitivos a través de la comercialización de ducto, lo que permite a sus clientes ser más rentables y competitivos.
México tiene una ubicación estratégica y acuerdos comerciales con más de 46 países, sin embargo, estos factores no son suficientes para que logremos aprovechar las oportunidades y derrama económica de 35 mil millones de dólares que el nearshoring podría generar.
Para poder realmente ser atractivos como país debemos resolver problemas de acceso a combustibles y materias primas, infraestructura y seguridad energética, concluyó Carlos Boone.