El programa Mujeres Conductoras de Jalisco, es una política pública de transporte con enfoque de género que ha garantizado el acceso y la participación de las mujeres en un sector productivo altamente masculinizado, y ha logrado romper estereotipos de género y cerrar las brechas de desigualdad económica que enfrentan las mujeres.

El estudio “Inclusión laboral femenina en el transporte público. Estudio de caso del programa Mujeres Conductoras en Jalisco, México”, revela también que la inclusión laboral de las mujeres genera beneficios para las empresas operadoras de este servicio.

En la primera edición, el Programa operó con un presupuesto de un millón de pesos mexicanos y tiene cupo para 55 mujeres por generación.

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De acuerdo con Joselyn Delgado Miranda, especialista en Política Pública y Economía para WRI México, la contratación de mujeres en labores de conducción tuvo efectos positivos en las empresas, pues son un grupo de bajo ausentismo y que, prácticamente, no renuncia a sus puestos de trabajo.

Los hombres, en cambio, registran un 25% de ausentismo y la rotación oscila entre el 10% y el 20 por ciento.

Gabriela de la Torre Ríos, Gerente de la Iniciativa TUMI E-Bus Mission para México y Colombia, señaló que este programa “es una oportunidad para atender el déficit de conductores que enfrenta el sector a nivel mundial”.

Agregó que es importante diseñar políticas transversales no sólo desde un enfoque de género, sino también con una perspectiva de inclusión social para abordar otra serie de desigualdades que viven otras poblaciones.

Mujeres Conductoras de Jalisco, un programa que cierra brechas

En este sentido, el estudio también destaca que el programa ha tenido un impacto positivo en la calidad de vida y autonomía económica de las mujeres conductoras – en su mayoría jefas de hogar – que ahora cuentan con mejores ingresos gracias a que tienen un empleo formal con prestaciones, lo que garantiza estabilidad económica para sus familias.

Las especialistas de WRI México reconocieron que una de las fortalezas de esta política pública es su diseño institucional, pues se trata de un programa transversal e intersecretarial financiado con recursos públicos.

La gestión del programa es conjunto entre la Secretaría de Transporte de Jalisco, la Coordinación General Estratégica de Gestión del Territorio, la Secretaría de Igualdad Sustantiva entre Mujeres y Hombres, instituciones educativas y transportistas.

“Para consolidar la inclusión laboral femenina en el transporte público, los programas de capacitación y profesionalización representan sólo el primer paso y es necesario crear mejores escenarios”, dijo Gabriela de la Torre.

El documento fue realizado por el Instituto de los Recursos Mundiales México (WRI México) como parte del trabajo de la Iniciativa TUMI E-Bus Mission en el estado de Jalisco, con apoyo de la GIZ (Gesellschaft für internationale Zusammenarbeit) y financiamiento del Ministerio Federal de Cooperación Económica y Desarrollo de Alemania (BMZ).