Renault anunció la transformación de su planta de Flins (Francia), que ahora alberga un nuevo taller de reequipamiento de robots.

La armadora explicó que, a finales de 2020, la planta de Flins emprendió un nuevo camino, para centrarse por completo en la economía circular. Así nació Refactoría de Flins, que es conocida por la renovación de vehículos usados y por su papel en el enfoque de Renault Group, es decir, la generación de valor a lo largo del ciclo de vida de los modelos de sus marcas.

Ahora, decenas de robots trabajan en la Refactoría de Flins. En este caso, en la unidad Retrofit, encargada de renovarlos antes de que vuelvan a las líneas de producción. Esta unidad ha renovado 40 robots en lo que va de año para contribuir a la puesta en marcha de importantes proyectos, como el nuevo Mégane E-TECH Electric de Douai.

Compartiendo robots

Parece una especie de reunión de ancianos. Los robots retirados de las plantas de Sandouville, Maubeuge y Douai están reunidos en el taller que dirige Nathalie, subdirectora general de utillaje en Flins.

Antes, cada planta reequipaba sus propias máquinas. Ahora, la Refactoría las reacondiciona todas, para disfrutar del beneficio de los equipos de especialistas que ponen en común sus conocimientos en un taller dedicado. En 2023, el equipo se duplicará y contará con ocho técnicos y un programador.

Una vez que los robots se han limpiado por completo, los robotistas los examinan para determinar qué hay que hacer para “revitalizarlos”. Puede ser sustituir la tarjeta electrónica, el arnés, el motor o la muñeca (parte del brazo). Y la Refactoría puede encargarse de todo ello. En total, hoy en día se tarda unas 40 horas en reequipar un robot.

Los robots que llegaron en 2021 procedían de la planta de Maubeuge, cuando dejó de producir la anterior Kangoo y empezó a producir la nueva versión en un nuevo taller. Los primeros 18 robots de soldadura y manipulación se desmontaron y se enviaron a Flins para su renovación. Una vez renovados, asumirán sus nuevas funciones en Douai, en la línea de montaje del nuevo Mégane E-TECH Electric.

Etapas de la metamorfosis

Antes de reequipar los robots hay que seguir varios pasos: registrar las fechas de fin de producción de los modelos, determinar cuándo estarán disponibles las instalaciones y centralizar las necesidades de las plantas.

Esto es lo que hace Gabriel, un arquitecto del ciclo de vida de la capacidad industrial. Su trabajo consiste en coordinar toda la operación de inventario con un corresponsal en cada planta y el enlace con los futuros clientes.

Tras el primer paso, es decir, la asignación, el equipo de retrofit se encarga del desmontaje, el transporte y la transformación de los robots. Los limpian, los drenan, cambian piezas, actualizan el sistema, prueban su precisión y resistencia y los preparan para su envío. Todos estos pasos son necesarios para renovar correctamente los sistemas de producción.

El taller, que se puso en marcha hace apenas un año, ya tiene un gran éxito y no paran de llegar pedidos de robots. Incluso España ha firmado para renovar parte del taller de chapa de la planta de Valladolid. La planta ha encargado seis robots (entre ellos cuatro de engaste), que serán suministrados por Sandouville y posteriormente reequipados en Flins.