Dos de cada diez vehículos circulan con exceso de velocidad, especialmente en vías limitadas a 20 km/h, donde se ubican centros educativos, parques y residencias, así como mayor actividad peatonal y ciclista. Dos de cada tres vehículos también incurren en rebasar, incluso al doble, la velocidad permitida en zonas con límite de 30 km/h.
 
Jesús Monclús González, director del área de Prevención y Seguridad Vial de Fundación MAPFRE, mencionó que el 20.92% de conductores registró algu´n evento de exceso de velocidad;  73,212 vehi´culos de una muestra de 349,169 vehi´culos incluidos de manera anónima en el estudio “Velocidad y usuarios vulnerables en México”.
 
Las mediciones se realizaron con equipos Bushnell, con especificaciones para medir velocidades entre 16 y 322 km/h a una distancia de 457 metros con precisio´n de +/- 2 km/h en la Ciudad de México, Guadalajara, Monterrey, Puebla y Tijuana.
 
“En los últimos 25 años los siniestros de tránsito han dejado cerca de 400 mil muertes; alrededor de 4 millones de heridos y más de un millón de años de vida saludable se han perdido por esas causas. Siete de cada diez fallecidos por siniestros de tránsito eran usuarios vulnerables peatones, ciclistas y motociclistas”, precisó.
 
Por su lado, Ángel Martínez, director general del Centro de Experimentación y Seguridad Vial México (CESVI México), señaló la preocupante realidad de que sólo el 30% del parque vehicular total en el país cuenta con un seguro para su vehículo, aunque las leyes lo establecen como obligatorio. “Un seguro no evita los accidentes, pero sí protege a las víctimas”, subrayó.
 
El estudio también dejó ver que las motocicletas y automóviles circulan a mayor velocidad, con un promedio de 50.28 km/h y 49.45 km/h respectivamente, seguidos por los autobuses y camiones a 45.33 km/h y 42.45 km/h, en el mismo orden.
 
Los indicadores obtenidos reflejan baja incidencia del exceso del límite de velocidad en vías rápidas (un 9% de vehículos en exceso de velocidad en vías con límite 80 km/h). Las causas se relacionan con el propio diseño de las vialidades, las políticas de gestión que las autoridades enfocan sobre éstas, así como los altos niveles de congestión que las caracterizan, ya que, el tráfico limita a los conductores a circular más lento de lo normal durante la mayor parte del tiempo. 
 
Las explicaciones fueron complementadas con la simulación de las consecuencias de rebasar los límites de velocidad, el cual fue supervisado por expertos de CESVI México.
 Fundación Mapfre se pronunció por:

Construir o modificar las vialidades para mejorar la seguridad de la movilidad para peatones y ciclistas.

Establecer un sistema de velocidades seguras que parta de un límite general de 50 km/h y de 30 km/h en zonas con un flujo elevado de usuarios vulnerables. 

Hacer cumplir los límites de velocidad permitidos mediante la legislación pertinente, apoyado por un observatorio de seguridad del tránsito y un plan de seguridad vial que se evalúe de manera permanente.

Emplear herramientas tecnológicas en vehículos como sistema de control de velocidad, así como en la optimización para la asistencia a víctimas de siniestros viales.

Sensibilizar a la población sobre los riesgos del exceso de velocidad con programas educativos y capacitaciones para la formación de conductores responsables.