Actualmente, la NOM-012-SCT de pesos y dimensiones, la NOM-035-SCT para la fabricación de remolques y dollies, y la NOM-068-SCT que establece las condiciones físico mecánicas de un vehículo, exigen el uso de este sistema de frenado, debido a que su función disminuye la probabilidad de accidentes carreteros.
 
Durante la quinta reunión de la Asociación de Unidades de Verificación (Auvac), Alejandro Romero, gerente de Ventas Técnicas y de Servicio en WABCO, explicó que el uso del sistema ABS en los tractocamiones y remolques es fundamental, ya que cuando existe una situación de frenado de emergencia, actúan para evitar el bloqueo de las ruedas, la alta temperatura en los frenos y detienen en menor tiempo y distancia a la unidad.
 
Señaló que este sistema eléctrico electrónico que se añade a la parte mecánica y neumática de un vehículo, cuenta con tres componentes principales: sensores de velocidad, unidad de control electrónica y válvulas moduladoras.
 
Los sensores se encargan de medir la velocidad del giro de la rueda y lo comunican a  la unidad de control electrónica, que es la que se encarga de comparar la información y  si alguna de las ruedas tiende a bloquearse, envía la señal a las válvulas moduladoras para que regulen la presión de las cámaras.
 
Para los fulles, que están integrados por un tractocamión, dos remolques y un dollie, la configuración básica del sistema ABS es de dos sensores y una válvula moduladora.
 
El representante de WABCO, instó a los técnicos de las unidades de verificación a revisar este sistema, ya que en algunas ocasiones los elementos que lo conforman no están conectados correctamente, lo que impide su óptimo funcionamiento.