Ante la decisión del gobierno de Texas de imponer revisiones a las unidades que cruzan por los diferentes puentes fronterizos que dividen a Ciudad Juárez con El Paso, el comercio está afectado y el valor de las mercancías retenidas en la frontera asciende a más de 1,500 millones de dólares, advierte la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (CANACAR).
La medida ha generado una crisis que se ha traducido en cierres, desvíos, incrementos en los tiempos de cruce e importantes reducciones en los volúmenes de exportación de distintos productos de México hacia Estados Unidos.
A la fecha, CANACAR tiene registro de un rezago en el número de exportaciones por 15 mil cargas.
El organismo considera que la medida impulsada por el gobernador Greg Abbott no corresponde al espíritu de cooperación plasmado en el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), ya que están en riesgo miles de empleos y las cadenas de suministro de ambos lados de la frontera.
Ante tal situación, la CANACAR manifiesta su preocupación por las afectaciones que se han generado tanto al comercio bilateral México-Estados Unidos como a este sector.
CANACAR destaca impactos por crisis en frontera con Texas
“Esta cámara reitera la petición que se ha hecho al gobierno del estado de Texas a través de diferentes vías de agilizar los intercambios comerciales que diariamente se registran en esta región y que representan una de las mayores fortalezas de la relación entre ambos países.
Al mismo tiempo, reconocemos los esfuerzos que se han hecho desde el gobierno mexicano a través de las secretarías de Economía y de Relaciones Exteriores para encontrar una solución a este problema y evitar las afectaciones que se han registrado al día de hoy”.
La CANACAR reitera que este tipo de barreras como las que promueve el gobierno del estado de Texas no corresponden a la visión de futuro plasmados en el marco del T-MEC.
Además, tiene un impacto directo en la economía de los dos países, afecta a las cadenas de suministro, compromete los flujos comerciales en la región y pone en riesgo a decenas de miles de empleos en ambos lados de la frontera.